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jueves, agosto 09, 2007

Topy Top y la globalización

Hace algunos años el premio nobel, Jagdish Bhagwati presentó su interesante libro En defensa de la globalización. Este texto es recomendado para todos aquellos que le temen a la apertura comercial plena. Mi posición en este tópico, sin embargo, es que esta situación debe darse en la medida que el Estado se fortalezca y construya con eficiencia la institucionalidad mínima de un país. Si el Estado no es capaz de defender los derechos de los menos aventajados, no sirve abrirse al mundo con los ojos cerrados y los brazos abiertos.

Aunque no necesariamente.

En Macroperu, acaba de publicarse el siguiente artículo que demostraría que la globalización puede contribuir a la construcción de una institucionalidad de una sociedad donde el propio Estado es incapaz de hacerlo.

Es el caso de los trabajadores de Topy Top. A continuación el relato de lo sucedido:
Topy Top –empresa peruana muy exitosa, aquí y en el extranjero- entra en conflicto con sus trabajadores, que demandan mejoras laborales y han osado organizarse en un sindicato. Ante esto, la empresa despide a un centenar de los faltosos, quienes por supuesto acuden al Ministerio de Trabajo y al Poder Judicial reclamando sus derechos. Y por supuesto, el Ministerio y el Poder Judicial resultan más inútiles que paraguas de buzo: Topy Top siguen en sus trece y los trabajadores en la calle. Pero ese no es el fin de la historia.

Lo que sigue es muy interesante: los trabajadores recurren a la solidaridad internacional. Mediante la CGTP hacen conocer su caso a sus colegas de las federaciones textiles españolas, quienes contactan a las grandes empresas europeas –como GAP e INDITEX- que compran a Topy Top. Y, ¡ojo al chancho!, estas multinacionales cuadran a Topy Top, informándole que su política laboral es incompatible con los estándares de conducta que exigen a sus proveedores. En otras palabras: “arregla con tus trabajadores si quieres hacer negocios con nosotros”.

Gran sorpresa: Topy Top que tan intransigente e intocable parecía, vuela a reponer a los despedidos, acepta negociar el pliego de reclamos y …. ¡agarrénse!… reconoce oficialmente al sindicato, incluso proporcionándole un local al interior de la empresa.

La magia que hizo que Topy Top cediera se llama “globalización”. Lo sucedido marca un hito en las relaciones laborales en el Perú, porque demuestra que nuestro país no es una isla, y que la apertura a los mercados internacionales exige adecuarse a los requerimientos de estos mercados. Así es el fútbol: sí los empresarios peruanos pretenden hacer negocios con el primer mundo, no pueden seguir manteniendo estándares laborales del tercer mundo. Reconocer eso es lo que diferencia al verdadero empresario del “empresaurio”.

El verdadero empresario sabe que su empresa no sólo compite internacionalmente por precio y calidad de su producto, sino también con su imagen corporativa y su política de responsabilidad social. Pero esa política de responsabilidad social no es sólo salir en los periódicos de vez en cuando regalando juguetes, sino muchas cosas más: compromiso con los clientes, pagar impuestos cumplidamente, no contaminar, y –especialmente- ser un empleador responsable, pagando remuneraciones dignas, otorgando beneficios justos y reconociendo los derechos laborales, incluyendo la libre sindicalización.
Cabe destacar que el sector donde ha ocurrido este milagro es el sector exportador textil, donde muchas empresas peruanas altamente competitivas se ven sometidas a estos códigos de conducta del cliente (donde se cuenta firmas transnacionales como Nike, Cutter & Buck, Lacoste, Under Armor, etc.) que garantizan un estándar laboral adecuado para sus trabajadores. Estos estándares toman como base la experiencia histórica que dio lugar a la Fair Labor Association, cuyos principios rectores dan forma a su código de conducta. Estos pueden revisarse aquí.

No obstante, lo que puede ser muy positivo en este sector, no necesariamente puede repetirse en otros sectores productivos por la sencilla razón que no existe una institucionalidad global similar a la anteriormente señalada.

Piénsese en sectores económicos que también sean altamente intensivos en mano de obra como por ejemplo, el hidrobiológico o la construcción. ¿Hay alguna experiencia similar a la textil? Hasta ahora no he leído una noticia positiva parecida a la comentada en este artículo. De hecho, he tenido la oportunidad de conocer a algunos trabajadores de estas empresas (muchas de las cuales se alojan en Tumbes) donde no tienen condiciones laborales mínimamente aceptables. Con seguridad, la globalización en estos sectores ha traído más desventajas que ventajas para la mano de obra disponible en estas regiones.

Es necesario conocer qué institucionalidad global podría ser ventajosa para los trabajadores de estos sectores para que, entonces, el Estado promueva alcanzar dicho estándar para conectarse sin temor alguno con los beneficios de la globalización.

Sólo así, creo que me declararé plenamente en un defensor de la globalización de manera acérrima.

1 comentario:

junior dijo...

Saludos, me place saber que aun quedan personas que no son miedosas y apesar de todo y contra todo salen al frente y dan la cara y todo lo que hay que dar en situaciones como las que les toco vivir a los emprendedores y valientes trabajasores de Topy Top...Soy una persona que estoy en similares condiciones y que apesar que me dijeron si no esta contento o no le gusto lo que se le paga no lo vamos a retener...Que cara duras y yo me mato por la empresa y trabajo 12 horas sin tener derecho a recivir nada porque si lo hago es posible que me digan lo mismo que la vez primera...Pero se llenan la boca y quieren alcanzar como lo dirian ellos "El ISO 9001"quieren alcanzar calidad de exportacion sin importar que sus trabajadores fingan estar contentos...Sino pasa lo de siempre...Descanse tomese unos dias de descanzo nosotros lo llamamos...Me da pena que personas que dieron años de su vida y tiempo a la Empresa rumbo al ISO 9001...Tengan que escuchar si sabiamaos que pediria CTS... No lo hubiecemos contratado... Ojala yo pueda hacer algo por mis trabajadoras que hasta el dia de hoy no cuentan con ningun beneficio y no tienen derecho a nada... Cordialmente. Junior Rojas Tafur (jrt2292hotmail.com)