En cuanto al artículo de Daniel Price "El resurgimiento del proteccionismo" (Punto de vista, marzo 28): Una vez más, las empresas multinacionales, con la ayuda de los medios de comunicación, han establecido un imponente órgano de prensa para tapar la creciente insatisfacción mundial con el mal llamado término "libre comercio ".Esta agenda es engañosa. Una manera más exacta para describir los llamados de libre comercio es "la explotación mundial de la mano de obra barata".El proteccionismo fue lo que dio a América su días de crecimiento y gloria a fines de los 40's, 50's y 60's. Mediante el uso de los aranceles, los Estados Unidos, Canadá, Europa occidental y Japón construyeron una fuerte base industrial y una sólida clase media.Durante los últimos 30 años, con el asalto a la clase media por la política del Reaganomics y de Margaret Thatcher, la base industrial de Occidente ha sido diezmada y los empleos de la clase media se han exportado a los mercados de mano de obra más barata en el tercer mundo.Durante las décadas de 1950 y 1960, una familia en Occidente sólo necesita un trabajador a tiempo completo para sobrevivir. Hoy en día, la mayoría de las familias dependen de dos personas en la fuerza de trabajo para su sustento.Si vamos a reconstruir una vibrante clase media debemos obligar a nuestros líderes políticos para que sirvan a la ciudadanía en lugar de a las juntas de directores y accionistas de las multinacionales.
POLITEKONGPT
domingo, marzo 29, 2009
La promesa vacía del libre mercado
G20 y la salida a la crisis global
sábado, marzo 28, 2009
Una nota sobre la corrupción en América Latina
viernes, marzo 27, 2009
Razones para no rescatar a Doe Run
- No somos como los estados fiscales de Estados Unidos ni Europa. Nuestra recaudación fiscal es bastante reducida en términos tributarios. La presión tributaria (recaudación de tributos internos entre PBI) regional de Junín es más baja aún 2.2% (2007). En términos per cápita mensual esta apenas alcanza los 15.9 nuevos soles ese mismo año.
- Elevados niveles de pobreza concentrados precisamente en las regiones altoandinas. En Junín esta alcanza al 43% mientras que su gasto percápita mensual apenas alcanza a 282.25 nuevos soles.
- Los niveles de desigualdad son bastantes altos, la distancia del 10% más rico al 10% más pobre es de más de 5 veces.
- Los niveles de contaminación son excesivos habiendo situado a la Oroya como una de las 10 ciudades más contaminadas del mundo (ver aquí en pdf).
- La economía de Junín tendrá una importante inversión minera de parte de capitales chinos los cuales podrían argumentar también algún tipo de ayuda para concretar la inversión.
- El Estado peruano acaba de emitir bonos de deuda por 1000 millones de dólares, y si comparamos el monto de rescate este casi representa el 10% de los recursos que se van a obtener.
sábado, marzo 21, 2009
Planes anticrisis, antes y después
Ranking mundial de economías subterráneas
Si hay explicación
Julio Castro Gómez, Decano del Colegio Médico Peruano, a propósito del último informe del MINSA que sitúa al Perú como el segundo país de sudamérica con mayor número de enfermos de tuberculosis, afirma:
El Perú está en una etapa de crecimiento económico sostenido, pero de manera inexplicable se produce el crecimiento de los casos [de tuberculosis], vinculado a las condiciones socioeconómicas, en particular la pobreza, donde la tuberculosis encuentra su caldo de cultivo.
En realidad si hay explicación. Si uno observa las estadísticas de déficit calórico, publicadas por el INEI, veremos que estas han ido aumentado sostenidamente durante el 2008. Las estadísticas de déficit calórico revelan cuál es la proporción de la población que no logra cubrir su requerimiento mínimo de calorías. Esta se sitúa alrededor de 2200 calorías diarias por persona, habiendo variaciones de unas cuantas calorías más o calorías menos según la región natural que consideremos ya que dependiendo de la actividad física hay zonas cuyo mínimo necesario puede ser mayor o menor correspondientemente. El déficit de calorías no es otra cosa que la presencia de hambre o de malnutrición.
Dos son los fenómenos que pueden llevar a una persona o familia a no cubrir su requerimiento mínimo de calorías: la inflación y la falta de provisión de alimentos por parte del Estado. Si vemos las estadísticas trimestrales correspondientes tendremos la figura completa.
Para comenzar la inflación tuvo un comportamiento alcista desde mediados del año pasado por el impacto del alza de precios de los alimentos en todo el mundo. A esto se añadió que la Universidad del Pacífico causó revuelo con su análisis de que los pobres sufren una inflación casi dos veces más alta que la que observa la población promedio. Osea que los pobres son los primeros en ser afectados por la crisis internacional debido a que su canasta alimentaria representaba más del 70% de su gasto familiar. El impacto inmediato es que la gente tiene menos capacidad de consumo, no puede cubrir sus requerimientos nutriciales y en consecuencia, aumenta la incidencia de hambre.
Pero después se añade el impacto de la caída de la cobertura de los programas alimentarios. Esta tuvo su mínimo histórico en el segundo trimestre del 2008, cerca del 20%, justo cuando el crecimiento económico seguía rebosante de dinamismo. Entonces el hambre se mantuvo alto pero no estacionario pues la población ha seguido creciendo. El tercer trimestre ha habido un impacto inmediato de la recuperación de la cobertura de los programas alimentarios, pero como la inflación ha continuado al alza, todavía persiste una tendencia hacia arriba en el porcentaje de hambrientos y malnutridos.
El resultado es que la población no sólo es proclive a enfermarse más, sobre todo de tuberculosis, sino que también se espera un menor rendimiento físico e intelectual. Estos problemas no debieran haber ocurrido si el Estado peruano se hubiera preocupado más por fomentar la equidad y el empleo digno en nuestra sociedad.
viernes, marzo 20, 2009
Caminos entre el Norte y el Sur
La evolución reciente de la crisis internacional plantea intervenciones de los gobiernos del Norte cada vez más extraordinarias. Mientras que el Tesoro de los Estados Unidos anuncia planes de salvataje del orden ya no por miles de millones sino más bien por billones de dólares[1], el Grupo de los 20 anuncia una nueva reunión para principios del mes de abril para discutir “como revivir la economía mundial”[2]. Entre las prioridades que se tomarán en cuenta en esta reunión se encuentran las iniciativas en contra de la ola de proteccionismo global, la reforma de la regulación financiera, el desmantelamiento de los paraísos fiscales, la reforma del FMI, el mayor protagonismo de las economías emergentes y el probable paquete de estímulo global.
Algunas de estas propuestas han sido suscritas y promovidas por la Red Latinoamericana de Deuda, Desarrollo y Derechos (Latindadd). Sobre todo las que conducen a la implementación de un modelo de desarrollo viable para América Latina, a saber, la reforma de la arquitectura financiera global y la búsqueda de una mayor justicia tributaria. En el primer caso la propuesta comprende el desarrollo de dos ejes claves: la regionalización de las finanzas y la refundación de las organizaciones de Bretton Woods. En el segundo, se plantea el desmantelamiento de los paraísos fiscales y del secreto bancario con la finalidad de revitalizar la capacidad fiscal de los Estados para financiar bienes públicos libres de la toxicidad innata de las nuevas deudas.
Pero otras propuestas no necesariamente toman en cuenta los caminos de solución a la crisis que se han propuesto insistentemente desde el Sur. Por ejemplo ¿Qué hay de la responsabilidad de los países del Norte sobre las deudas odiosas e ilegítimas que todavía asfixian al mundo en desarrollo? ¿Qué hay de su responsabilidad sobre el problema del cambio climático a escala global? ¿Por qué los países del Norte pueden proteger o rescatar a sus empresas a costa de dos de sus principios ideológicos más exigidos al mundo en desarrollo: el equilibrio fiscal y la propiedad privada? ¿Por qué los países desarrollados dedicarían apenas el 0.7% de sus paquetes de estímulo nacionales si el compromiso histórico es aún mayor: 0.7% de sus PNBs anuales? ¿Por qué no se discute las soluciones a los problemas mundiales en un espacio más democrático e inclusivo como es el de las Naciones Unidas y no en un club cerrado de ocho o veinte países poderosos que sólo velará por sus prioridades?
Las respuestas a estas preguntas tienen que ver con la necesidad que tienen los países más ricos de asegurar su prosperidad limitando las posibilidades de industrialización de los países menos desarrollados, generosamente abundantes en materias primas. Es un modelo de integración injusto que perpetúa la pobreza y la desigualdad. Es por ello un modelo de integración tóxico porque genera ganancias privadas durante el apogeo (creando desigualdad) y crisis generalizadas a escala global que son pagadas por todos, porque no se fundamenta en los principios de economía solidaria con equidad de género y uso racional de los recursos naturales. Si los países industrializados hubieran destinado los pocos recursos solicitados para brindar una oportunidad a millones de seres humanos para salir de la pobreza[3] probablemente ahora no hubiera sido necesario inyectar tanto dinero –sin éxito- para rescatar a sus grandes capitalistas. Habría sido costo eficiente para los países desarrollados atender a los costos para alcanzar los ODM en vez de afrontar costosamente la actual crisis. Sus intervenciones parecen más bien agravar la crisis ya que el capital continúa hambriento de recursos frescos y gratuitos sin arriesgar.
Frente a esta realidad en curso, propuestas como las de Ha-Joon Chang[4], es decir, la de construir una combinación pragmática de comercio libre (entre las grandes potencias) con proteccionismo para la “industria infante” de los países en desarrollo parece ser una de las medidas más coherentes para permitir que el mundo tenga posibilidades de crecer a pesar de la crisis. En todo caso, es necesario que tanto los gobiernos del Norte como del Sur puedan discutir soluciones conjuntas para lograr un contrato social de escala global. Las soluciones que provengan de un solo lado de la esfera dejarán de lado los intereses de la otra, que en buena cuenta no tendrían por qué ser distintas: que las finanzas y el comercio estén al servicio del desarrollo y el buen vivir de toda la humanidad.
[1] FED, Nota de prensa del 18 de marzo de 2009.
[2] FT.com, 11 marzo 2009.
[3] El Banco Mundial estimó que se necesitaban desde el 2000 al 2015, entre 40 y 70 miles de millones de dólares para alcanzar los objetivos del milenio. Esto es, 600 mil millones o un billón de dólares para alcanzar los ODM en el mundo entero. Shantayanan Devarajan et al, 2002, PRWP 2819, The World Bank.
[4] Ha-Joon Chang, Jobs, not shopping, Prospect Magazine, Issue 156, march 2009.
martes, marzo 17, 2009
Terrorismo y coca en el Perú
- "Los soldados piensan que todos somos terroristas, y con esa idea ellos destrozan cualquier cosa que se mueva".
- "En tanto que para Rosa Chávez Sihuincha, la mujer embarazada asesinada en Río Seco, el [ministro de Defensa Antero Flórez Aráoz] sugirió que ella recibió lo que se merecía".
jueves, marzo 05, 2009
El déficit de factores 2008
lunes, marzo 02, 2009
El plan anticrisis ¿Un programa radical proempresas?
¿Qué quiere decir con "shock"? ¿Cómo definiría a la "doctrina del shock"?
Un shock es cualquier acontecimiento catastrófico que nos desorienta. Mi forma preferida de entender el shock es decir que es la brecha entre un acontecimiento y el relato que lo explica. Ese lapso, esa brecha que se abre entre acontecimiento y relato es el estado de confusión en el cual somos vulnerables. La doctrina del shock es la filosofía del poder que entiende que esa brecha es el mejor momento para imponer un programa radical pro-empresas.