POLITEKONGPT

jueves, julio 12, 2007

Aumenta el cuestionamiento a los principios del libre mercado en USA

En un artículo del día de hoy en el New York Times se dibuja el creciente debate que existe entre los economistas de las facultades de economía estadounidenses con las siguientes palabras (traducción libre):
Para muchos economistas, cuestionar la ortodoxia del libre mercado es similar a expresar la creencia en un diseño inteligente frente a la convención propuesta por Darwin. Aquellos que dudan de los beneficios naturales del mercado se les considera como engañados o locos.

Pero en los últimos meses, los economistas se han ocupado en un apasionado debate sobre la forma como se enseña su especialidad en las facultades de todo el país, y que son practicados en Washington, cuestionando las ideas más preciadas de esta profesión acerca de no interferir en la economía.
En nuestro país, hace ya buen tiempo que un sector de los economistas cuestiona las políticas económicas que nos son dictadas desde el primer mundo, aunque lamentablemente no con el suficiente instrumental ni con la riqueza académica necesaria para debatirlas y reducirlas. Aquellos economistas que si hacen eco de las ideas de Washington son los que salen ganando por convertirse en fieles operadores de las recetas que estos dictan.

Sin embargo, los magros resultados en términos de la desigualdad, no sólo en Estados Unidos, sino en el mundo entero, estarían provocando este arrebato apasionado de cuestionamientos entre los propios académicos de las facultades de economía gringas. Incluso algunos que son considerados como los nuevos iconos del neoliberalismo gringo niegan ser parte de ellos, como por ejemplo Greg Mankiw, muy popular porque su libro de Microeconomía se difunde y utiliza en nuestras facultades de economía locales (ver aquí su blog).

Ya varios de estos economistas han dado sus pasos en ese sentido, entre ellos, Samuelson, Tobin, Modigliani, Solow, Sen, Stiglitz y muchos más, que de paso han recibido sus respectivos reconocimientos a través del Premio Nobel, precisamente por cuestionar los principios básicos de la economía del libre mercado. ¿Recibiremos algún premio por aquí por hacer eco de esta nueva corriente? ¿O quizá sea necesario seguir la vertiente de pensamiento al que De Soto rinde tributo para salir entre los 12 mejores economistas de todos los tiempos?

---------------------------
Para leer el artículo del NYT seguir este enlace.

No hay comentarios.: